Un vistazo al premio por riesgo local

Fuente: propia

El Mercado Chileno: ¿Acciones o Bonos?

Cuando analizamos las oportunidades de inversión en Chile, comparar las ganancias potenciales de las acciones (representadas por el IPSA) con el retorno seguro que ofrecen los bonos del gobierno (como el BTP a 10 años), parece una buena métrica.

El inverso del ratio Precio/Utilidad (P/U) del IPSA nos dice cuánto dinero ganan las empresas por cada peso que invertimos en ellas. Si comparamos esta cifra con la tasa que paga el bono del gobierno, podemos ver el premio que ofrecen las acciones por sobre la deuda.

Actualmente, este premio no nos parece tan atractivo (ver gráfico). Al comparar el premio de las acciones con el promedio histórico de casi 10 años, vemos que el mercado está en un punto de "valor justo". En términos más sencillos, ya no parece haber un gran descuento o una oportunidad excepcional. Si incluso acortamos el análisis a los últimos 12 meses, la conclusión es similar: las acciones y los bonos chilenos están ofreciendo una recompensa similar en relación a sus riesgos.

Esto no significa que las acciones del IPSA no puedan seguir subiendo, como lo hicieron en 2021 o a fines de 2017. Sin embargo, el costo de oportunidad de tener toda la inversión en el IPSA es alto. En simple, la rentabilidad extra que solíamos obtener por asumir el riesgo de las acciones se ha reducido, haciendo que la renta fija sea una alternativa más atractiva.

Aunque el escenario político actual parece favorable a un ambiente más pro-mercado —lo que sin duda es una buena noticia para las acciones chilenas—, las nubes sobre la economía local aún no se han disipado. La incertidumbre por una posible estanflación o una recuperación económica lenta persiste.

Por lo tanto, la estrategia más prudente es diversificar. No se trata de abandonar las acciones, sino de equilibrar la cartera. Combinar la renta variable con deuda local (bonos) es una opción inteligente. Esto nos permite asegurar una parte de nuestro retorno, reducir el riesgo y mantenernos protegidos ante la volatilidad, mientras el panorama económico se aclara. El momento actual sugiere que un enfoque balanceado es la mejor apuesta.